Desde el 2016, cada 30 de septiembre se conmemora el Día Internacional del Trastorno Específico del Lenguaje (TEL), una alteración de la comunicación que interfiere en el desarrollo, comprensión, adquisición y expresión del lenguaje en las y los niños. Por este motivo, la Radio de Camioneros conversó con Verónica Maggio, de la Universidad Austral.
“Es un momento en el año donde se trata de concientizar de este trastorno en la niñez y genera conflicto en el aprendizaje y la conducta”, comentó primeramente.
En este marco, sostuvo que “es algo de origen neurobiológico, son cablecitos que no están del todo conectados que hace que los chicos tengan dificultad para relacionarse”.
“El trastorno del lenguaje en sí es algo que viene con la persona, después hay factores que eso se vea agravado. Para que un chico aprenda a hablar necesita que otros le hablen y cuando ese estímulo no está el lenguaje se desarrolla más pobremente”, agregó la entrevistada.
Además, remarcó: “En chicos que no tienen el trastorno del lenguaje y están expuestos a las pantallas también se ven afectados por este trastorno. Hay diferentes parámetros, pero pensando en la franja de los 2 a 3 años el chico que no tiene respuesta a las pequeñas órdenes eso puede ser un predictor de dificultad”.
“Lo que dicen los libros es que a los dos años tienen que tener 50 palabras sueltas y de los dos a los tres tiene que poder armar frases cortitas. Pero siempre tienen que consultar con un pediatra quien después seguramente se derivará con una neuróloga en el caso que corresponda”.
Por último, dijo que “este tipo de dificultad entra dentro de la ley de discapacidad, suelen sacar certificados transitorios durante el tiempo que dure la intervención y todo lo que altere la evolución del niño en Argentina de otra manera no se consigue”, cerró.