Operarios del área de Energía de la Cooperativa Eléctrica intervinieron en dos conexiones clandestinas, denunciadas.
La primera de las intervenciones se concretó a partir de una denuncia de la Guardia Urbana, a solicitud de los vecinos afectados, que detectaron la conexión clandestina en un domicilio situado sobre la calle Cadfan Hughes.
Esta conexión estaba generando cortocircuitos en la línea, que generaba un riesgo potencial tanto a los usuarios como a los vecinos que habitualmente circulan por el sector.
En tanto, en barrio 290 Viviendas se denunció a un vecino del sector que se encontraba realizando maniobras para “colgarse” de la red, tras lo cual los operarios se trasladaron al sector y procedieron a su desconexión.
Cabe señalar que este tipo de maniobras se repite frecuencia, por lo que el Consejo de Administración de la empresa prestataria, advierte que el robo de energía constituye un delito penalizado por la ley; que cada conexión clandestina genera no sólo un grave riesgo para quienes hacen usufructo de ellas, que pueden resultar electrocutados o provocar un incendio en su propia vivienda, sino que además causan serios inconvenientes a los usuarios regulares, que sufren daños en sus electrodomésticos y artefactos debido a la fluctuación de la energía.
Por tal motivo, la Cooperativa sugiere a los usuarios regulares que formulen la denuncia pertinente cada vez que detecten maniobras de esta naturaleza, a los efectos de preservar la óptima prestación del servicio y evitar riesgos innecesarios.