El presidente del Consejo de la Magistratura en Chubut, Rafael Lucchelli, habló tras la elevación a jury al juez de la Cámara de Apelaciones de Esquel, Claudio Petris. “Acá vino una denuncia, y es nuestra obligación gestionarla, ver exactamente si hay, por decirlo de alguna manera, una causa probable que amerite la destitución o no”, expresó.
En este sentido, señaló -en dialogo con Radio de Camioneros- que “acá lo que debemos entender es que, a pesar de lo que señalaba el magistrado Petris, que era una suerte de ataque político hacia él como presidente de la Asociación de Magistrados y Funcionarios, es una cuestión de otra índole”.
“Todos los magistrados estamos obligados a tener un estándar más alto en cuanto a nuestro comportamiento, porque de alguna manera nosotros estamos al servicio de la Justicia y de la sociedad”, dijo.
Asimismo, aclaró que “el doctor Petris en su defensa sobre las cuestiones que le fueron imputadas, no brindó las aclaraciones necesarias para desvirtuar parte de estas imputaciones”.
“Por eso entendimos necesario que -en el marco de un jury de enjuiciamiento lo haga. También quiero explicar que esto no significa que se removió al juez Petris del cargo, simplemente se determinó que el juez Petris vaya a un órgano diferente, que es el tribunal del jury, compuesto por dos diputados, dos abogados, un ministro del superior tribunal de justicia, para que de todas las explicaciones del caso, y no se afecte la imagen del servicio de justicia”, indicó.
En este marco, destacó que “nosotros no actuamos de oficio, solo lo hacemos cuando hay una denuncia realizada. Antes no hacemos ningún tipo de control sobre ningún magistrado y funcionario”.
“Nosotros no hacemos un seguimiento de la evolución patrimonial, o de las conductas de nadie. Hay muchas personas que, de buena fe, creen que el Consejo de la Magistratura es un órgano que puede impugnar la decisión de un tribunal”, afirmó.
A su vez, aseveró: “Hay algunos comportamientos, no todos, que ameritan que eventualmente un juez pueda ser restituido”.
“Acá vino una denuncia, y es nuestra obligación gestionarla, ver exactamente si hay, por decirlo de alguna manera, una causa probable que amerite la destitución o no. El doctor Petris, a mi juicio, intentó explicar algunas cuestiones de manera puntual, pero cuando uno hace un análisis general, todos entendimos que había que profundizar la investigación, que había que darle a este magistrado, en el ámbito de un jury de enjuiciamiento, la oportunidad para que aclare todas las cuestiones del caso”, manifestó.
Finalmente, Lucchelli recordó: “La sociedad nos exige realmente que tengamos jueces que estén más allá de toda duda. Necesitamos que la gente confíe”.