El director de la Oficina de Derechos y Garantías, Carlos Oyarzo, habló sobre el significado de los 35 años de la Convención Internacional de los Derechos de Niñeces. “Para marzo de este año, teníamos una lista de espera de 280 situaciones. Al día de hoy no sabemos cuál es el número de esta lista, porque hace más de un mes estamos esperando respuestas de la Secretaría de Desarrollo Humano”, sostuvo.
En este sentido, señaló -en diálogo con Radio de Camioneros– que “nos parecía importante que nuestra comunidad sepa el actual funcionamiento de nuestro sistema de Protección de Derechos”.
“El 35° aniversario de la Convención de los Derechos de Niñeces y Adolescentes no es una celebración, es un llamado para que se trabaje por la garantía efectiva de los derechos”, dijo.
Asimismo, aclaró que “para marzo de este año, teníamos una lista de espera de 280 situaciones. Al día de hoy no sabemos cuál es el número de esta lista, porque hace más de un mes estamos esperando respuestas de la Secretaría de Desarrollo Humano. Solo sabemos que son situaciones que el Servicio de Protección de Derechos calificaba entre graves y gravísimas”.
“El Servicio de Protección tiene que intervenir cuando hay una situación de vulneración denunciada o cuando se lo soliciten. Por ejemplo, de violencia, maltrato, abuso o intentos de suicidio, cuando la escuela, institución o familia dan aviso se tiene que actuar”, indicó.
En este marco, destacó que “entendemos que esa intervención tiene que ser inmediata, no solo nosotros, sino que los tratados internacionales y las normativas lo dicen, por lo cual es una falta grave que exista una lista de espera”.
“En Comodoro las situaciones que se han acrecentado en el último tiempo tienen que ver con las desigualdades sociales, pobreza, cuestiones vinculadas al acceso a la vivienda, a la tierra. Existe un problema grave que tiene que ver con la infraestructura urbana”, afirmó.
A su vez, añadió: “Muchas de nuestras familias se ven obligadas a tomar tierras o vivir en espacios donde no existe la infraestructura urbana adecuada. Esto incrementa situaciones de desigualdad y desprotección para nuestros niños, niñas y adolescentes”.
“Cuando detectamos una situación, necesidades concretas que la familia no puede cumplir para sus niños y adolescentes, el Estado Municipal o Provincial tarda en dar respuesta y sabemos que tienen que ser inmediatas. En el último año hemos recibido alrededor de 200 situaciones en las que intervenimos”, concluyó Oyarzo.