Y acá lo justifican.
Hace unos días se publicó la reedición del primer álbum de la icónica banda en diferentes formatos, atados a la época. Pero los que escucharon, encontraron diferencias en el sonido. Brian May y Roger Taylor decidieron cambiar algo que en la grabación original, al parecer, no quedó como el grupo hubiera querido: las baterías.
Gracias a los avances tecnológicos los músicos pudieron retocar digitalmente todas las baterías del disco grabado en Trident Studios de Londres junto al productor Roy Thomas Baker.
Roger Taylor lo recuerda así: “Teníamos un contrato con los propietarios del estudio. Recuerdo que estaban Lou Reed y David Bowie produciendo Transformer. (Bowie) Había terminado Hunky Dory y Ziggy. Era el lugar ideal. Los Beatles hicieron ahí “All You Need Is Love”. Era el lugar de moda, así que nos pareció genial: ¡estamos en Trident!”
Brian May: “Recuerdo que Roger se enojó porque se encontraba en una situación desconocida. En lugar de tocar en una sala con su kit, que conocía, de repente se encontraba en una sala diminuta con una batería ajena, que era minúscula y transparente, de plástico, toda cubierta de cinta, literalmente cubierta de cinta. Le habían quitado casi toda la piel al bombo y tenía un almohadón adentro. Él intentaba tocar esa cosa y la odiaba”.
“Nos sentíamos unos privilegiados por estar ahí y estábamos disfrutando de la compañía los unos de los otros, desarrollando nuevas ideas. Esperamos 52 años para llegar a este punto, para hacerlo como debería haber sido en un principio. Siempre odiamos el hecho de que Roger no tocara su propio kit. No sonaba a él”.